Esta vez conocimos al poeta suiza Blaise Cendrars. Para conocer más acerca de la vida y obra del autor os invitamos a visitar la revista Poesía Más Poesía Número 64 y
PANAMÁ O LAS AVENTURAS DE MIS SIETE TIOS
(extracto…
para leer el poema completo
os recomendamos la revista
Las 2001 Noches Número 137)
A Edmond Bertrand, barman del Matachina
Libros
Ciertos libros hablan del Canal de Panamá
Ignoro qué dicen los catálogos de las bibliotecas
Y no escucho los periódicos financieros
Aunque los boletines de la Bolsa sean nuestra plegaria
cotidiana
El Canal de Panamá se halla íntimamente vinculado a mi
infancia…
Yo jugaba bajo la mesa
Disecaba moscas
Mi madre me narraba las aventuras de sus siete hermanos
De mis siete tíos
Y cuando recibía alguna carta
¡Qué deslumbramiento!
Aquellas cartas de hermosas estampillas exóticas con versos
de Rimbaud como leyenda
Este día no me contó nada
Y me quedé muy triste debajo de mi mesa
También por aquel tiempo leí la historia del terremoto
de Lisboa
Pero estoy seguro
Que el crac de Panamá es de una importancia más universal.
Pues trastornó toda mi infancia.
Tenía un bello libro de estampas
Y veía por primera vez
La ballena
El nubarrón
La morsa
El sol
La Gran Morsa
El león el oso el chimpancé la serpiente de cascabel y la
mosca
La mosca
La terrible mosca
-¡Mamá, las moscas las moscas! ¡Y los troncos de los
árboles!
-duerme, duerme hijo mío
Ahasverus es un idiota
Tenía un bello libro de estampas
Un gran galgo llamado Durak
Una niñera inglesa
Banquero
Mi padre perdió las tres cuartas partes de su fortuna
Como tantas honradas gentes que perdieron su dinero en
aquel crac
Mi padre
Menos tonto
Perdió el de los demás,
Tiros.
Mi madre lloraba.
Y aquella noche me enviaron a dormir con la niñera inglesa
Al cabo de un largo número de días…
Debimos mudarnos
Y las pocas habitaciones de nuestro departamentito estaban
atiborradas de muebles
Ya no nos hallábamos en nuestra villa de la costa
Pasaba a solas días enteros
Entre los muebles amontonados
Hasta se podía romper la vajilla
Tajear los sillones
Demoler el piano…
Al cabo de un largo número de días
Llegó una carta de uno de mis tíos
¡El crac de Panamá hizo de mí un poeta!
Cosa sorprendente
Todos los de mi generación
También son muchachos
Que han sufrido peripecias extrañas
Ya no jugamos con los muebles
Ya no jugamos con trastos viejos
Nos embarcamos
Se cazan ballenas
Se matan morsas
Siempre se tiene miedo de la mosca tsetsé
Pues a nosotros no nos gusta dormir.
El oso el león el chimpancé la serpiente de cascabel me
enseñaron a leer…
Oh aquella primera carta que descifré solo más efervescente
que la creación entera
Mi tío decía:
Soy carnicero en Galveston
Los mataderos quedan a seis leguas de la ciudad
Y soy yo quien transporta los animales aún chorreantes de sangre, al atardecer, a lo largo de la playa
A mi paso los pulpos se yerguen en el aire
Mientras se pone el sol…
Pero había ahí algo más
La tristeza
Y la añoranza de su país.