Golpeando los ejes
Saltan chispas en el yunque
golpeando los ejes,
mis sentidos, como pétalos abiertos,
van sonando profundos
en submarinos oxidados.
Un sonido agazapado,
lo no dicho haciéndose rogar
se pega a las alcantarillas,
papel diluviado,
que nunca logro alcanzar.
Ruido sutil, roedor incansable,
acúfenos, otolitos,
animales abisales,
dejadle un susurro al aire.
Olfateando tu mirada,
observo tonos agudos,
pensamientos esdrújulos,
que yo no puedo escuchar.
Y esta tarde, mi gata caza fantasmas
que alguien sueña en Qatar.
Mónica Herrero
Golpeando los ejes
Aquella carrera, golpeando los ejes, aquella carrera ha sido rápida y tempestuosa, golpeando los ejes porque no podía parar…
No había podido parar, no sé si pudo parar, paso desenfrenado fueron aquellos años, Juventud sin fin.
No pudo frenar su vida, era mucho el dolor que embargaba su alma enamorada, avanzó a un destino sombrío y no pudo parar el galope.
Golpeando los ejes a ver si paraba, no pudo parar, no pudo parar…
Aquella mañana, aurora de luces, golpeando los ejes al fin pudo parar, ya había terminado y el camino cesó, ya no hay dolor ya no hay herida ya no hay amor…
Amalia Rondón
Golpeando los ejes
Vacío en una mujer
sola conmigo mismo
mientras que las puertas de las casas de otras familias
se cierran.
Luces en las ventanas,
cenas en el interior.
El viento ligero,
la brisa del anochecer
mientras que decide que aún no quiere tener frío
y sigue respirando.
El aire virgen del todo es posible,
la mente tierna y sin dolor.
Laura Trat
